Foto de: Manuela Suárez
Uno de los mayores retos del próximo Presidente de la República será mejorar las condiciones de vivienda de algunos sectores de la población nacional, dado que, según una investigación realizada por BBVA en el año 2017, en el país, 2.2 millones de hogares tienen déficit habitacional. De esa cifra, 0.6 millones cuentan con déficit cuantitativo, es decir, son hogares que habitan en viviendas inadecuadas, con carencias habitacionales en cuanto a su estructura o que son hogares que comparten con otros su vivienda. De esos, 1.6 millones necesitan mejoras.
De acuerdo con la doctora de Estudios Urbanos y Ambientales y profesora del Instituto de Estudios Urbanos de la Universidad Nacional de Colombia, Yency Contreras, uno de los retos más importantes del nuevo gobierno en materia de vivienda tiene que ver con la superación de la idea de la vivienda como la producción del número de unidades habitacionales que se necesitan para superar el déficit cuantitativo.
En su concepto, la visión debe estar articulada con todos los soportes públicos que se requieren para garantizar un hábitat digno y de calidad como lo establece la Constitución Política de Colombia. Y se debe garantizar que la vivienda esté articulada con todas las decisiones de ordenamiento territorial en el país, que hacen que esta se piense no solamente en términos de lo que es la vivienda nueva, sino también otras posibilidades que se tienen desde la política de vivienda sobre el déficit cualitativo y cuantitativo, tanto en las áreas urbanas como rurales. Este último abarca, viviendas que presentan deficiencia en piso, espacios para preparación de alimentos, hacinamiento mitigable o alguna carencia de servicios públicos básicos (energía, acueducto, alcantarillado y basura).
Sin embargo, el país ha avanzado. Según un estudio realizado por BBVA, la vivienda es el principal destino de las edificaciones. La participación de la vivienda social pasó de ser el 21% del total de las viviendas en 2007 al 26% del total en 2017. Esto, según el informe de gestión del Ministerio de Vivienda el año pasado, ha beneficiado a 5.3 millones de colombianos, dado el desarrollo de los programas del gobierno nacional en términos de construcción de hogares.
Para seguir creciendo en este aspecto, según Leonardo Romero, director de Planeación de la Constructora Prodesa, es clave mantener los subsidios y los incentivos para la compra de vivienda nueva; no sólo para los proyectos de vivienda de interés social, sino también para proyectos de estrato medio y alto donde una segunda vivienda subsidiada es una muy buena opción para impulsar el sector.
Manuela Suárez
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